Admito no
recordar con mucha claridad mi tiempo de aleyo, ya que al haber sido consagrada
a temprana edad son pocos los recuerdos que puedo tener en cuanto a mi visión
de osha para este tiempo, sin embargo en la actualidad creo estar siendo
testigo de situaciones nada acordes con el deber ser.
Debería
llamar a éste blog, “El Blog de los ENTENDIMIENTOS”, si, porque paso a
comprender muchas cosas aún cuando no asuma que las consecuencias sean las más
idóneas, por lo que ante la cantidad de estafas a las que se ven sometidas
muchas personas que desean formar parte de este culto, he visto con buena lid la
necesidad que han tenido algunos de educarse antes de dar un paso en la religión,
a fin de no vivir experiencias negativas una y otra vez, que estemos claros,
eso implica perdida de dinero, de tiempo y lo más delicado fe.
De los
pocos recuerdos que mantengo del tiempo de aleyo y de iyawo, creo que algunos
nos ha marcado la tan mentada frase “iyawo no habla”, esa frase en la que los
mayores nos exigían mantener silencio en cuanto a temas religiosos, por lo cual
no debíamos opinar y mucho menos objetar las conversaciones de éstos, cosa que
en mi caso aún conservo con mis padrinos (hasta cierto punto) y que me lleva al
colapso total al ver que otros no lo hagan con cualquier mayor y en cualquier
circunstancia teniendo o peor aun no teniendo consagración alguna.
Éste es el
punto LOS ALEYOS LAWAS, cada quien será consagrado en el momento oportuno, al
menos ese es mi pensar, la osha o ifá, llegan en el justo instante en que lo
necesitamos, pero creo que las personas que más han estudiado sin consagración
son las que curiosamente más tardan en ser consagradas y no me vengan con el
cuento de que en Africa se estudia antes, porque hablo de los Afrocubanos, esos
que nos formamos con la palabra “neófito” como bandera consagratoria, y tampoco
me venga con que si Pedrito de los Palotes era el padrino de Olodumare y así le
enseñaba a sus ahijados o que el mismo Shangó lo hacía, seamos objetivos, yo no
llamaría a esto coincidencia, quienes más involucrados están en los secretos
más se alejan de la consagración.
Punto
álgido del asunto, Señor Aleyo, puede comerse mil libros, puede tener mucho
tiempo en el estudio, puede escuchar
muchas experiencias, pero no es igual de la puerta para afuera que de la puerta
hacia adentro, no es igual ver o saber que vivir, no imaginan lo chocante que
es oír a un aleyo esmoñarse con un awo o con un olorisa, siempre van a quedar
como prepotentes, pero no puedo hablar sólo de quien incurre en la falta de
iniciar la pelea, también debo expresarme sobre la conducta del awo o del
olorisa que cae en la discusión. En una oportunidad un awo se interesó en tener
discusión para medirse en conocimientos conmigo, a lo que contesté, “ya
perdiste, ya que tu asumes que tenemos el mismo lenguaje, el tuyo es ifa, el
mio puede que también lo sea pero con visión de olorisa”, sin menospreciar ninguna
de nuestras consagraciones, así pienso en el caso con los aleyos lawas y
eruditos del conocimiento.
Asuman mis
amados eruditos que aun cuando el religioso ud. lo observe errado en su
criterio, esa persona pasó por un proceso consagratorio que ud. aun no, por lo
que no sabe si en algún momento pensó como ud., pero las experiencias vividas
de la puerta hacia adentro le han hecho cambiar su forma de asumir conductas
religiosas. No se ponga a sermonear iyawoses porque ud., no sabe lo que es un
iyaworaje, para eso los iyawoses en teoría saben en que se metieron y las
consecuencias de sus actos, para eso tienen una libreta de vida, que ud. no
conoce, y personas que le guían. Si un consagrado quiere llamarse SANTERO y ud.
leyó dos artículos de “AQUILES VAESO” Awo Otura Mesabe, ahijado del Gran Obara
Melosétodo, y ud. se cree el Superman o Batichica de Osha e Ifa, le recomiendo
que cierre su piquito y conserve su silencio, porque ud. no va a venir a educar
a personas que quizá ya tenían unos 30 años de osha cuando ud. ni había nacido
en este mundo pecador y lo que puede recibir es un comentario recordándole su
condición de no iniciado, para que ud. después asuma que el olorisa o awo es un
prepotente.
Lo he dicho
y mantengo en muchas intervenciones en foros de internet, una visión se tiene
como aleyo, otra como iyawo, otra después del año, otra como padrino y una muy
diferente después de 10 años de osha, supongo que con 20, 30 o 60 años de
consagración no se verá de la misma forma, por lo que este es mi criterio hoy,
quizá mañana no sea el mismo, no por bipolaridades sino que las experiencias
enseñan y aún me falta camino por andar...
Onareo
Oba
Aina!!!!!



