En la misma
onda de la publicación anterior, paso a seguir tomando las respectivas
medicinas para las náuseas que la situación me produce y continuar emitiendo la
opinión correspondiente.
Sobre el
punto relacionado con es que “de
cuando acá los irunmoles bajan a la cabeza de un mortal así de fácil” sería
oportuno hacer una reflexión, antes de entrar a considerar la cita de ésta
persona, debe observarse que hasta los momentos no he conocido religión alguna
que no contemple las posesiones, quizá la connotación que da cada una, marca las
considerables diferencias, sin embargo todas se manejan en base a energías que se
internan por un período de tiempo en un ser humano con diferentes fines, en las
positivas puede apreciarse como dones o bendiciones de los cuales se hacen
beneficiarios no solo quien tiene los canales de energía propios sino aquellos
que comparten creencias y en la parte negativa responden a situaciones
perturbadoras que viven algunas personas por y para su destrucción.
En el caso del
tema que nos ocupa, bien lo dice mi estimado y respetado Baba Raúl Díaz Montes
de Oca Osun Ayan, en su
blog “Awon Egbon Fun mi aije”,  en el post titulado “Elégùn
– Eshin Òrìsà (Medium o Caballo de Òrìsà)”, referenciando en el momento de la posesión
que:
“… las personas dicen o hacen cosas que normalmente no dirían o harían,
transformándose así en “otra persona”. Entonces, ellas cantan, danzan de manera
diferente, se expresan verbalmente y
los fieles reciben sus mensajes como venidas del Òrìsà, que ahora esta
personificado en “medium”.
Sin embargo, para recibir o tener esta capacidad de incorporar un
Òrìsà, esas personas tienen que pasar por ciertos rituales de purificación e
iniciación para luego de cumplidos los rituales, tener el privilegio de ser
considerados especiales, sin importar el sexo, la edad, o el tiempo de
iniciación. Pues una persona que
posee la capacidad de incorporar a Òrìsà es vista como un escogido y no existe
honra más grande para un adepto del culto que tenga la capacidad de incorporar
a Òrìsà, prestando su Orí àti ara (Su cabeza y cuerpo) para tornarse en medio
de comunicación directa de Òrìsà con los demás fieles del culto.
Un Elégùn entonces es una persona que es escogida por Òrìsà, y esto es
un don que es adquirido antes de nacer, durante
la escogencia de nuestro destino entre muchas cosas, tomamos los dones que
tendremos en nuestra vida en Aije (en la tierra).” (Subrayado y
negrillas de quien suscribe)
No puedo estar más de acuerdo con Baba Osun Ayan, por lo que
me atrevo a resumir que estamos ante varios requisitos concurrentes: 1) La
existencia de un don escogido por nuestro propio ori (concepto que transpolamos
de la práctica tradicionalista) 2) Incorporación de una energía a un individuo
previa realización de rituales, esto implica preparación; y 3) El fin perseguido
comunicación con los fieles.
Reiterando mis vagos conocimientos en prácticas
tradicionales yorubas, tengo entendido que ciertamente en el viejo continente
el orisa al tomar posesión no se comunica por vía oral con las personas, pues
el medio empleado por excelencia para las comunicaciones son los oráculos, el
caso es, que cuando se unieron los cultos de las deidades africanas y nace la
práctica afrocubana, se implementaron rituales muy diferentes a los realizados
en África y a consecuencia de ello se producen hechos antagónicos a la práctica
origen, vuelvo a considerar que si existen fue porque las mismas deidades lo
permitieron. 
Ahora bien, si esta persona que publicó lo absurdo que es
que un “irunmole” tome posesión de un simple mortal, me pregunto ¿Qué pasa en África
entonces? ¿Por qué aclara la diferencia con los “montadores de aquí”? Pues si
es imposible que esto ocurra en nuestra afrocubana y su frase indica
comparación de dos hechos, quiere decir que en África ocurre, vuelvo a
cuestionar ¿por qué es posible que ocurra en la práctica tradicional? ¿Por qué asegura
que el proceso de posesión es así de fácil? ¿Qué pensaran los montadores
respetuosos, honestos, responsables y religiosos de esto “tan facilito?.
CONTINUARÁ…

 
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