jueves, 31 de octubre de 2013

Casos y Cosas de los Tambores… Episodio IV


SECCIÓN II

Continuando con el asunto de los Tambores y los Omo Ala Aña y las opiniones que generan sus acciones durante los ceremoniales…


4) Banquete de Rey VS. Hambre de Mendigo: Como Olorisa que ha ofrecido tambores para osha, debo indicar que cuando se hace con gusto no se escatima en detalles, considero que lo que osha me ha dado no llega a ser ni el 1% de lo que pudiese gastar en un tambor. El tema de los que tiene o los que no tiene obara meyi, no es el asunto , porque todo religioso debe tener especial atención a la comida. En nuestras práctica la comida no puede faltar ni quedar escasa, lo dicen varios odun ésta no solo es abundancia sino representa la bendición de que quien se siente en tu mesa poco podrá maldecirte, quizá por eso en mi caso no gasto tanto dinero en telas ni esos detalles, me preocupo más por la comida, pero una cosa es brindar a los comensales una buena comida y otra muy diferente es que se pretenda que la mesa de los omo ala aña sea como para abastecerla en aras solventar el hambruna de toda Africa. 

Respeto el hecho de que algunos religiosos no pueden consumir ciertas carnes de animales inmolados a osha y que lo más prudente es que se ofrezcan alimentos poco probables de ser tabú para la mayoría de los religiosos, pero de allí a las exigencias de un tipo de comida distan de tan siquiera un leve visto bueno que pueda tener del asunto. aarte que algunos son tan descarados que van 10 tamboreros y comen por 40 personas, llegan tarde, duran 3 horas, distribuidas de la siguiente manera: 10 min para sentarse a la mesa, 10 min para comer, 10 min para repetir, 1 h 30 min hacer sobremesa y 1 hora adicional para hacer "sobre" sobremesa, para luego tocar flojo 2 horas, obvio después de un banquete a cualquiera le gustaría tomarse un buen café o un Sambuca, fumarse un cigarrillo y acostarse a hacer la siesta.

5) Directores de Orquesta y Coro: Nuevamente debo iniciar entendiendo… entiendo que mucha gente acude a los tambores y parece que va a oír a la sinfónica, error, en los tambores hay que cantar, comprendo a veces la molestia de los omo ala aña, es cierto, terminan reventados, asumo que no es fácil tocar y cantar y de paso quedarse sin voz porque nadie responde los cantos, pero de verdad no tienen idea de lo chocante que puede ser el “¡¡¡Abran la boca Señores!!!” “¡¡¡Canten Coño!!!”.

Sólo a título informativo, nuevamente entendiendo que debe ser un verdadero fastidio cantar todos los días “Kawo e”, que todo el mundo se la sabe no por ir a tambores sino por aquella canción de Richie Ray y Bobby Cruz o aquella inédita de Celia o la canción de “La Lupe”.

Fea la comparación pero los religiosos estamos acostumbrados a las “chatarritas”, piénsenlo nada menos inspirador que ir al concierto de tu artista preferido y cante todos las canciones de su nuevo disco sin tocar los clásicos.

Las “chatarritas” todo el mundo se las sabe, todos las cantan y hacen que fluya la energía. Señores omo ala aña, cuando se ponen a cantar algunos suyeres que a uds. les gusta, pero que nadie conoce, no se pongan como directores de orquesta, no se molesten ni salgan con groserías; recuerden que para estos mundos ese idioma es de poco conocimiento, dificulto que podamos aprender unos 20 suyeres en 2 horas en un idioma que poco conocemos. ¡¡¡NO INSISTAN EN TODO EL TAMBOR CON LO MISMO!!! Enseñen nuevos cantos, pero no en todo el tambor.

Continuará...

miércoles, 30 de octubre de 2013

Casos y Cosas de los Tambores… Episodio IV


SECCIÓN I

Sin duda no podía excluir en estos temas de los tambores a mis apreciados Omo Ala Aña y consideré prudente hacerlo en tres entregas, aquí les publico la primera de ellas…

Si hay algo que debe reconocerse es que la mayoría de los iniciados en cualquier culto llevan a cabo sacrificios para lograr las consagraciones y no solo aquellos que parten de los ceremoniales propiamente dichos, sino los esfuerzos realizados a efectos de alcanzar tan preciada meta, hablamos de restricción de gastos, de trabajos adicionales para reunir el dinero, entre otras cosas.
Por lo poco que se de la iniciación del omo ala aña, las ceremonias son bastante fuertes y que deben llevar un mérito aquellos que pasan por ella, pero eso no impide que tenga una concepción critica sobre las actuaciones de los omo ala aña, por eso expongo lo siguiente:

1) Sobre quienes pueden o no estar en un aña: Seguimos con el tema de las tradiciones, en Cuba nunca he visto exclusión de aleyos en los aña, sin embargo en mis primeros tiempos como consagrada en Venezuela en pocas casas veía la presencia de éstos en los aña. Las viejas casas restringían el acceso de los no iniciados. Debo confesar que mi casa religiosa partiendo de la tradición de la casa matriz permitió por unos 13 años que todo aquel era bienvenido en un tambor, sin embargo Oshun hace un año y medio indicó que ya no quería ver no iniciados en los aña, palabra que ha sido respetada hasta hoy, sin embargo he observado desde siempre un número considerable de omo ala aña que solo tiene su iniciación ante dicho orisa, pero no han sido consagrados en osha, puedo entender que las circunstancia que rodean aña son otras, pero me pregunto ¿ por qué no hacerles la misma concesión a un aleyo con digamos iniciaciones de cierta envergadura?. OJO y yo estoy a estas alturas de mi vida religiosa a favor que el aleyo NO participe en tambores, pero ni retirados, la lógica me dice que si me han educado en el hecho de que cuando se consagra en osha, aña lleva el mensaje a Oludamare de la nueva consagración (fin principal) y que de pasapalo no puedo bailar ante aña por no estar “presentado”, ¿como entonces podemos tener un iyawo que no ha sido presentado fuera del tambor y a un aleyo que aun no pasa por osha en él?. Se lee como absurdo ¿No?.

2) Tambores nocturnos por más de un compromiso adquirido por el tambor para un mismo día: No me lo han contado, he visto grupos de aña que en un mismo día se comprometen a dar dos toques, seamos honestos, lamentablemente ahora a los religiosos les ha dado por hacer tambores después de las 4:00 p.m. con el cuento de que todo el mundo se desocupe y vaya al aña, antes el aña estaba a las 12:00 haciendo el oro seco, el año pasado fui a uno donde el tambor llegó a las 8:00 pm. Culpa del religioso que fija la hora del aña, culpa del tamborero que se compromete a mil cosas el mismo día, comodidad y faranduleo.

3) Gafas de sol para ver a la luz de la luna dentro de una habitación oscura: Nada más cierto que lo que dicho mi padrino Eshu Oba Niwe, “los ojos delatan”, de verdad no entiendo la manía de los tamboreros en usar lentes oscuros dentro de espacios donde no se ve ni la luz de la lámpara, me crea suspicacia, seamos realistas, a los que tenemos 4 dedos de frente nos pareciera que es una forma de “chismear” y que no se evidencie, lo cual lejos de que pase, se hace más evidente, me pareciera que con los lentes aparte que se creen Ricky Martin en su época de Menudo cantando “Gafas Oscuras”, están teniendo una panorámica de todo el mundo para luego sentarse cual comadres de vecindad a cortarles el traje a “Raquel y Todo aquel”.

Continuará….

martes, 29 de octubre de 2013

A Tres Meses de tu partida


Hoy haré un alto a los “Casos y Cosas de los Tambores” por un motivo especial para mi… El día 27 de julio, durante el aniversario de consagración de Ifa de mi padre, hablaba con mi hermano Irete Unfa, que la hija de Obatala más bella que existía era mi negra conga, mi oyugbona Olufandei; que lejos estaba de pensar que dos días después me llamarían de Cuba a darme la noticia de su fallecimiento.
La Gran Caridad Pratt Olufandei

El 29 de julio del año en curso, perdí a un pedacito de mi vida,…  De verdad hablar de “Mi Caru” se queda corto con todo lo que esa negrita me inspiraba, pero haré el intento…

Después de asertivamente haber escogido a una gran madrina, Oba Iroko, faltaba sólo la oyugbona, recuerdo haber contado los días con ansias de viajar a Cuba y hacer mi consagración en osha, admito que para el momento, en mi inocencia nunca pensé que era importante el asunto de la “segunda madrina”. Bueno… la espera fue mayor por un asunto imprevisto, mi hermana nacería primero, ¡Ay Olofi esperar una semana más!, pero ¿ya qué?, eran menos días que al principio.

Después de permanecer mucho tiempo encerrada en un cuarto, durante el proceso de consagración de mi hermana, al fin me dejaron salir, por supuesto ya había terminado todo y Mi China se veía hermosa en su trono. A mí me dejaron sentadita en un taburetito frente del rinconcito del sabor, lo bueno era que veía todo lo que hacían fuera, pero curiosamente lo que más llamó mi atención fue una risa súper contagiosa, seguido de un “nombre… no” y una cantidad de frases dichas entre risa que no se entendían… Lo cual años después conocería como el papiamento de mi madrina.

Para ese día aún no se sabría quien sería mi oyugbona, por lo que me acerqué a preguntarle a la matrona de la casa (la madrina de mis padres) ¿quién es esa viejita, esa vale… la flaquita, negrita, de camisa azul con círculos rojos y amarillos y una falda gris? ¿Ella puede ser mi oyugbona? A lo que Mima me contestó: ¨” ¿Caruca? Claro que si, esa misma será, ella tiene hecho Obatala, no le digas nada”. Casualidades del destino la escogí el día de su cumpleaños de vida.

Así el 17 de septiembre de 1998, bien tempranito en la mañana me levantaron para hacer las respectivas ceremonias, no sin antes llevarme a casa de Caru, que al vernos subir por la calle hasta su casa gritaba “nombre no, Lucia…. no vieja…. Caballero… Obatalá no está”, pero sus palabras fueron en vano, irrumpimos en su casa y Mima, le dijo “Oye si no das coco tu lo doy yo” y ante la mirada perpleja de mi viejita y su renuencia en hacerlo, Mima tomó las vistas y después del ritual correspondiente Oba Moró dio un perfecto eyeife. Bingo… “tirese iyawo, ya tiene oyugbona…” a lo que ella contestó… “ño… te mandaste ¿y que se le va hacer a ella?” Shangó con oro para Aggayu… y lo último que le oí decir ese día fue “Ave María… ñoooo…”.

Mi oyugbona era de oro, porque calarse una iyawo tan difícil como yo, no era trabajo de impacientes, fueron 7 días de un perfecto golpe de 3 de la mañana, “madrina baño”, “madrina tengo sed”, “madrina no te duermas”, aparte de que siendo más acuerpada que ella aún cuando solo tenía 14 años, le tocó cargarme en varias oportunidades por todo lo que viví dentro del igboosha, pero todo era disculpado porque le guardaba el secreto cuando se bebía el aguardiente de las pinturas.

Para mí fue un misterio su vida, aún después de fallecida nadie sabía cuál era su tiempo de osha realmente, desde el 98, me decía “este año cumplo 27” vaya ud. a saber qué tiempo tendría diciendo que tenia 27, así pasó con su nombre, le pregunté madrina que significa Olufandei y me dijo… “ay yo sabía, pero ya se me olvidó”, ella sólo recordaba que en su tiempo ni con caracol le bajaron el ángel de la guarda, me comentó que iba hacer osha y buscaba para hacerse Oyá, como le indicaron sus mayores, pero no encontró las telas de colores y le dijeron busca azul para hacerte Yemayá, a la final consiguió fue blanca y me decía que de su itá una de las pocas cosas que recordaba era que le dijeron “nació la hija perdida de Obatala” y vaya que esa viejita estaba en las nubes… y de verdad era hija del moreno de ropas blancas.

Muchas personas no entienden lo que vale un padrino, mucho menos lo que representa una oyugbona, la mía la veía cada año y pasé unos 5 sin verla, pero yo me enamoré de esa negra, la que no se le entendía al hablar, la que yo como ahijada debía guiarla cuando me rogaba la cabeza o me atendía religiosamente hablando, la que no sabía hacer una moyugba, pero la que adoraba, sentía y vivía por osha…

Ese fue el regalito que me dio Aggayu y Obatala por casi 15 años, el regalito que extrañaré, pero que no dejaré de recordar, agradecer por la corona que junto a Oba Iroko, Eshu Oba Niwe y bogbo iworo construyó para mi… No dejaré de pedirle a Oludumare que me la tenga como una estrella en ara orun para que su luz me siga irradiando…  Iba e Caridad Pratt, Mi Conga Olufandei…!!!

Onareo
Oba Aina!!!!!

miércoles, 16 de octubre de 2013

Casos y Cosas de los Tambores… Episodio III


Creo que se hace oportuno darle un subtitulo a esta publicación y el más adecuado sería Ser Montador o Morir en el Intento”.

Son tantos los temas de los cuales hay para sacar punta que cada minuto pienso algo diferente en lo que pueda escribir, todo viene de situaciones observadas en un pasado no muy lejano pero van haciendo peso en mi memoria y necesitan ser drenadas.

En mis primeros años de vida religiosa, por la pasión que tengo hacia el tambor batá, no existía fiesta donde no estuviese con mi mejor disposición a gastar la suela de los zapatos en la bailadera, dispuesta a perder el secado del cabello y se me chorreara el maquillaje, de allí me gané el apodo de “La Dueña del Wemilere”, bueno, en algo mi amado inquilino (Kabiyesi Shangó) tenía que salir a flote, pero con todo lo que veía al pasar los años me alejé lamentablemente de los tambores, pero lo que se hereda no se hurta, volvió a llamarme añá y reactivé mis andanzas.

En ese retorno, hace poco más de un año asistí a un tambor que marcó mi vida religiosa, les comento…. En el transcurso del ceremonial estaban un par de jóvenes consagradas, que en edad de vida mundana y pecadora dudo que llegaran a los 20 años, lo que me llamó poderosamente la atención es que no había comenzado el rezo de su orisa tutelar cuando estas niñas tenían una actitud que aquí en Venezuela llaman mucho “Sirmba” o “zirimba” que como dije hace poco en el foro de Ashe, desconozco si es término yoruba (aunque lo dudo), pero de verdad me choca la palabrita. 

Sirimba o Zirimba que observo de la siguiente manera: movimientos evidentemente EXAGERADOS, nada acorde con el llamado del tambor, mucho menos con los suyeres, donde los medianamente objetivos pensamos que posiblemente se produzca una lesión en el tallo cerebral. Disculpen mis amigas olo oshun que adoro y a las cuales respeto con la vida, porque jamás las he visto en eso, pero las chicas ejemplo son las hijas de Oshun que si alguna “sirimbeada” es hija de la morena del sabor, como que les da por ser Shakira, Streeper o la joven versión de la Tongolele (y que me perdone ese gran ícono del baile y la cultura americana por la comparación).


Para volver a la historia, de las niñas percibí que estaban total desconocimiento que el canto era de su orisa tutelar hasta que fueron informadas, acto seguido comenzó lo que ya les dije, la sirimba, por supuesto algún crédulo o quizá alguien sensato de ver el ridículo que hacían las sacó y continuó el tambor. Ya casi para finalizar los omo ala aña parecían unos DJ e hicieron un remix, si como lo leen, pero bueno, peores cosas se han visto que si dañan, esa no era algo que me quitara el sueño, y a que no adivinan… Apenas las niñas oyeron la mención de su orisa tutelar volvieron al espíritu de la Tongolele y a mi me volvió Emily Rose en plena posesión (El Exorcismo de Emily Rose).

A todo esto se produce la reflexión, veo tan delicado el hecho de que la energia de osha pueda irradiar a alguien, para cualquier hijo de nadie se mofé de esto, el ser montador no sólo debe ser una dicha sino que implica un alto grado de responsabilidad como portadores de una bendición que tiene osha para ser vehículos de esta. Creo que por lo que pasa un eleggun no es nada sencillo, supongo que las sensaciones corporales deben ser en gran medida incontrolables, el sólo hecho de saberse imposibilitado de tener el control de uno mismo debe ser de gran impacto para un simple ser humano, eso a nivel de individuo ahora observemos el montador en relación a la sociedad religiosa.

Quien finje posesiones no observa, que toda mentira se descubre, así pasen mil años, hay un flagrante irrespeto a osha, al mismo individuo y al colectivo, hacen que las personas pierdan la fe (aunque esto sea un concepto cristiano), pero simplemente se produce incredulidad que afecta a los verdaderos eleggun, por otro lado tienen implicación ante falsas adivinaciones, hay inocentes que no estan en el conocimiento de reconocer un falso montador (o como cariñosamente llamamos por estos lados un platanero) y siguen instrucciones pudiendo ser incluso nocivas para estos.

Lamentablemente veo una necesidad de las personas en que osha les irradie y ser eleggun, no se si es que se creen menos consagrados por no sentir nada o el mismo ambiente los presiona, así he visto casas donde hay personas que son potentes montadores y sus familiares religiosos hacen antesalas a posibles shows afectando la psiquis de la persona, no soy psicologo, pero es algo de lógica, si a mi en algún momento Aggayu me hizo tirar dos pasos largos en un tambor o me sacó a la estratosfera y a cuanto tambor voy mis hermanos comienza... "Ahora viene Nohemi y se monta", "porque Nohemi se monta bello", "Que le canten a Aggayu para que veas el Aggayu que le viene tan arre....", obviamente viene el ego y puede que me sienta obligada a responderle a la gente y si Aggayu no viene pues aparece lo que he llamado "mas que amor frenesi", entonces en ese frenesí el mismo cerebro me juega una trastada y es donde NO soy montadora o si lo soy en ese momento no tengo ninguna energia en mi cuerpo que se asemeje a una posesión de osha y muero en el intento, cayendo lamentablemente en el ridiculo.

Es importante recalcar algo, no dudo de los eleggun, mi madre, hermana, padrino, madrina, amistades que son como mis hermanos, lo son, y mi oyugbona (iba e) tambien lo era, así que no dudo de la irradiación de osha, pero tampoco confio en todo el que se despeine bailando con el primer canto. En mi caso tengo una advertencia de Shangó y Oshun que me han dicho que en algún momento Aggayú le va a dar por hacerse el chistoso, puedo decir que he sentido una que otra energia medio extraña en ciertos momentos, pero hasta he pensado que es el viento, todo con tal de mantenerme en pleno uso de mis facultades mentales hasta que el decida que es momento de despegarme de la tierra y gozar con el cuerpito prestao'.

Quienes son montadores saben que pueden ir a 20 tambores seguidos y 40 consagraciones y quizá no sienten nada, no les da nada, ahora hay personas que no pueden oir que en un celular suena en un "bara suayo" porque ya estan brincando y saltando, creo que son sujetos a presión de que quizá a mi madrina le da, a mi hermano le da, a mi mamá le dá, a mi ahijado le da, pues a mi me tiene que dar... Estoy llegando a pensar que los problemas de los religiosos radican en el ego, yo les digo algo sin que me quede nada por dentro... POR MI QUE LE DE HASTA A LOS BABALAWOS, A LOS OMO ALA AÑA, A TODOS, YO LOS ATIENDO A TODOS, LES CUIDO TODO ME QUEDO SOLA CON TODO EL MUNDO MONTADO (como en algunas consagraciones me ha pasado) PERO QUE A MI NO ME DE, debo admitir soy miedosa, se ve muy lindo, es tremenda bendición, pero me da terror...

Los viejos religiosos ven con asombro la cantidad de montadores que hay y que ya a cualquiera se le hace la ceremonia respectiva, estos son los viejos que aún se mantienen en que el ashe llega con el tiempo de consagración adecuado, con las respectivas pruebas superadas y con la bendición del padrino y su orisha alagbatori; me sigue pareciendo acorde la vieja escuela, quizá reactivandola muchos no moririan en el intento de ser montadores...

Este es mi criterio hoy, quizá mañana no sea el mismo, no por bipolaridades sino que las experiencias enseñan y aún me falta camino por andar...

Onareo
Oba Aina!!!!!